CDMX-04/Mayo/2020
Si hay una herramienta intelectual que en verdad ayuda a comprender el cambio, sus orígenes, sus mecanismos, las distintas formas que toma y sus consecuencias, lo es sin duda la “Teoría de la Transformación” formulada hacia finales de la década de los 70’s por el ya desaparecido Dr. George Land, Científico en Teoría General de Sistemas.
Ya desde finales de la década de los 80’s del siglo pasado se vislumbraba el final de los cambios predecibles y de los tiempos tranquilos. Al menos en las últimas dos décadas venimos hablando del fin de los “cambios incrementales”, la llegada de los “cambios disruptivos” y de los ambientes Volátiles, Inciertos, Complejos y Ambiguos (VICA). Finalmente, en el último lustro empezamos a hablar de la “Cuarta Revolución Industrial”, “Industria 4.0”, “Transformación Digital”, “Inteligencia de Negocios” y un sinfín de conceptos más.
Justo ahora, a la amenaza de pérdida de empleos en el mundo debida a la rápida expansión de la robótica y la inteligencia artificial, se suma la enorme probabilidad de una recesión económica mundial -anunciada ya desde hace un par de años-, probabilidad que se ha incrementado drásticamente con la súbita aparición de la pandemia del COVID-19.
Que si el COVID-19 es el resultado de una mutación natural, o que si se debió a un murciélago mal cocinado por un ciudadano chino, o que si fue creado por científicos estadounidenses y sembrado en China para provocarles un descalabro económico, o que si es un experimento de los chinos que se salió de control, o que si es una represalia de los musulmanes iraníes, o que si es obra de los “Illuminati” para implantar el “nuevo orden mundial”, o que los “reptilianos” lo introdujeron para iniciar la reconquista de la Tierra… ¡en fin!… las redes sociales abren una gama infinita de posibles explicaciones a todo lo que ocurre (y también a lo que no ocurre)… lo cierto es que hoy en el mundo nos encontramos inmersos en un inédito e inexplicable Punto de Quiebre que únicamente podremos comprender e interpretar si contamos con las herramientas intelectuales adecuadas.
La “Teoría de la Transformación” no es, de ninguna manera, la “Panacea Universal” pero, hoy por hoy, es la mejor herramienta de pensamiento con que contamos para entender el cambio y resolver (o sortear) los retos de supervivencia a los que hoy nos enfrentamos.