Mil millones comienza con uno. La Organización de las Naciones Unidas declaró hace un par de años que una de las formas más efectivas para mitigar la crisis climática es la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, una segunda es la reforestación.

La ONU hizo el llamado para que gobiernos, empresas, organizaciones y sociedad en general se sumaran a plantar árboles.

“Plantar mil millones de árboles puede ayudarnos a frenar los efectos del cambio climático”, si bien es un gran número entre todos podríamos lograrlo.

Es un importante esfuerzo de restauración forestal pero los beneficios son múltiples. Los árboles filtran el aire limpio, proporcionan agua potable fresca, ayudan a frenar el cambio climático, crean hogares para miles de especies de plantas y animales, y finalmente, puede ser parte del ADN de tu empresa

Reforestación como acción de RSE

Plantar mil millones de árboles puede ayudar a salvar la Tierra de la deforestación y las PyMe’s pueden y deben jugar un papel importante en este esfuerzo.

Si bien, es conocido que las grandes marcas realizan este tipo de acciones frecuentemente, la realidad es que el trabajo colectivo de la PyMe’s superaría con creces lo que hacen las grandes marcas. 

¿Quizás también te has preguntado cómo involucrarse en acciones de sostenibilidad ambiental y más en concreto mover a tu empresa a una RSE más diversa? 

El objetivo es sencillo, retribuir al medio ambiente puede ser tarea de una gran marca o una PyMe, no hay diferencias en este sentido; ya sea un árbol o cientos de miles, la meta es seguir plantado. 

Hoy, tu PyMe puede realizar una acción que perdurará por años, incluso te ayudará a mejorar tu imagen de marca y tanto los empleados actuales como los nuevos, valoran este tipo de acciones, adicional a que es una dinámica fácil de impulsar y que ayudará a la integración de tu equipo. 

¿Qué ‘ganas’ con una reforestación?

Realizar una reforestación es un ganar-ganar por diferentes razones, la principal es que nuestro planeta realmente lo necesita.

Los bosques en el mundo está desapareciendo rápidamente. En 2018, Global Forest Watch informó que el equivalente a 30 campos de fútbol de bosques está desapareciendo cada minuto. Cuatro de cada diez árboles que existen se están talando para fabricar productos de papel de uso diario. Es necesario tomar medidas drásticas para proteger nuestros bosques y proveer para las generaciones venideras; pero detener la deforestación es un esfuerzo complicado y no es tan tangible como la restauración.

Por otro lado, en las grandes ciudades, los espacios verdes cada vez se reducen más, dando paso a construcciones o simplemente dejan de recibir el cuidado del gobierno y la sociedad. 

La reforestación es una de las mejores formas de ayudar al planeta y es una de las formas más fáciles para que las empresas retribuyan a la naturaleza, compensando en parte cosas como su propio uso de energía y las emisiones por sus operaciones cotidianas

Internamente, plantar árboles permite a los empleados conectarse con la empresa para una misión más grande. Participar en esfuerzos sostenibles ayuda a aumentar la moral, la retención de los empleados y la felicidad general en el lugar de trabajo.

En entradas previas hemos descrito cómo juega la RSE en los empleados. Se ha demostrado que los empleados están más comprometidos y se desempeñan mejor cuando se sienten bien con la participación en la RSE de su empresa; una reforestación brinda una experiencia colaborativa y gratificante.

“Hacer algo por tu sociedad y tus stakeholders no solo llevará tu negocio a un nivel superior, sino que también garantizaría el crecimiento y el éxito a largo plazo”.

Anónimo

Las PyMes tienden a centrarse en hacer crecer su negocio, a veces pasando por alto la importancia de la RSE tanto para los empleados como para los consumidores; más en la situación que vivimos donde el confinamiento por la Covid-19 han puesto en jaque a la economía mundial, pero esto no quiere decir que podemos dejar de lado a la RSE, que es cuando más se necesita.

Si lo vemos en el plano externo, tanto si vendes al consumidor final o no, los consumidores tienen en cuenta a la RSE al momento de interactuar con una marca; esto sucede igual en un mundo B2B; tu cliente te investigará y podrás ‘presumir’ de tener un programa de RSE y las reforestaciones son una forma de comunicar unidad y responsabilidad. 

La reforestación es visible, medible y fácil de explicar 

Las empresas suelen buscar el hilo negro en acciones medioambientales y aunque pueda parecer que la acción que estás realizando es excelente y da grandes beneficios, posiblemente sea difícil de explicar.

Una reforestación es un término que todos entienden y pueden medir el impacto real. Imagina que decides reforestar el parque local de tu comunidad, en esta ‘simple’ acción podrás explicar fácilmente a tus audiencias qué estás haciendo, cuántos árboles plantaste y cómo estás haciendo el mantenimiento. 

Adicional, si tu empresa realiza una reforestación, el beneficio a comunicar no solo es plantar árboles; a nivel ambiental que estos árboles ayudarán a limpiar agua, absorberán CO2, darán oxígeno, protegerán la biodiversidad, disminuirán las burbujas de calor en las ciudades, entre otros factores; en el nivel empresarial comunicas la unión de tu empresa en una tarea común, así como la ocupación por temas que atañen a la RSE. 

Esta comunicación no se quedará internamente, sino que debes abordar las redes sociales para construir tu identidad de marca. Publica tus esfuerzos, las fotos y videos de tus acciones que son la prueba de contenido que autentica estas historias, inspira a tu comunidad y crea afinidad con la marca.

Por último, no tienes que ser un experto para realizar una reforestación, incluso si no sabes nada del tema, puedes acercarte a proyectos ya establecidos como el de PlanetaB o ReforestamosMexico, donde te orientan a cómo realizar una reforestación, desde los permisos que se necesitan en la locación a realizar la actividad, el tipo de árboles que se deben plantar, hasta cómo comunicar tu contenido en redes sociales.

Como dice el dicho “el mejor momento para plantar un árbol fue hace 20 años, el segundo mejor momento es hoy”. Ayuda al planeta, mejora tu RSE y forja lazos internos que te ayudarán a tener un equipo más comprometido con tu empresa.

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Imagen: Vecteezy / spearheart0